"En ningún lugar encuentra el hombre refugio más apacible, más tranquilo, que en su propia alma." — Marco Aurelio
En nuestro trabajo (y en la vida en general) somos objeto de crítica por parte de otras personas. Lidiar con lo que la gente opina de nosotros o de nuestro trabajo o de nuestras decisiones a veces se puede tornar complicado.
Una implementación no lo suficientemente óptima, una decisión de diseño errónea o una concesión en la metodología de trabajo puede disparar la reacción de nuestros compañeros y que acabemos siendo señalados.
Ante esta tesitura, disponemos de varias herramientas que podemos aplicar para sacar provecho y mantener nuestro estado de calma.
Amor fati
Disfruta la prueba que te ha puesto el Universo delante y afróntala con el mejor carácter posible. Recuerda que para esto es para lo que estás aprendiendo Estoicismo.
Dicotomía de control
No está en tu mano si los demás te critican o no. Incluso haciéndolo todo bien, alguien puede criticarte de la misma manera. Luego no dediques más tiempo del necesario en este tema.
No te lo lleves a lo personal
Epicteto nos dice que cuando alguien te lanza una crítica, no es que te esté criticando a tí sino a su percepción de la realidad. Si no se corresponde con la verdad, el problema lo tiene el otro que no ve las cosas como son y no tu.
Aprovecha la crítica
Séneca también nos aconseja sobre estas situaciones. Dice que “El hombre sabio no se ofende por la verdad. Si alguien señala un error en ti, agradécelo, porque te ha dado una oportunidad de mejorar." Luego si alguna vez te arrojan una crítica, acéptala y piensa “¿Qué puedo sacar de esto para poder mejorar?”. Incluso aunque la crítica sea infundada y no real puedes pensar “¿Por qué tiene esta persona esta concepción de esot?” y procurar que no vuelva a pasar.
Vive según la virtud
Intenta no depender de la aprobación externa. Vive según los preceptos de Coraje, Templanza, Sabiduría y Justicia. Muchas veces hacer lo correcto te hará ganar críticas por parte de tus iguales. Debes estar por encima de eso porque quieres hacer las cosas acorde a la Naturaleza.
Con todo este repertorio (y mucha práctica) seguro podrás mantener la calma más fácilmente ante ataques de terceras personas. Recuerda que es importante practicar constantemente para afianzar estas formas de pensamiento en tu cerebro y que se disparen de forma automática.
No dejes de practicar.